La cojera no es una enfermedad aislada, sino un cuadro clínico de dolor relacionado con el aparato locomotor. En la mayoría de los casos, las lesiones en los cascos son la causa principal de la cojera en las vacas. En función de su etiología, las lesiones de los cascos se dividen en infecciosas y no infecciosas. La lesión infecciosa más frecuente de los cascos es la dermatitis digital. Mientras que las úlceras de la suela, las hemorragias y la enfermedad de la línea blanca son las lesiones no infecciosas más comunes de los cascos en el ganado lechero.
La prevalencia de las cojeras, pese a la mayor concienciación sobre su impacto económico, sigue siendo extremadamente alta.1,2 Los factores que podrían estar influyendo en la cojera se pueden clasificar en 3 grupos: factores del entorno, manejo del rebaño, factores relacionados con cada vaca.
El tratamiento correcto de una vaca con cojera debe incluir en primer lugar un arreglo curativo del casco. En el potro de arreglo de cascos se puede inspeccionar minuciosamente la extremidad afectada, lo que permite un diagnóstico preciso. Se pueden administrar antiinflamatorios y anestésicos locales para aliviar el dolor inmediato y después del arreglo.3,4 Las enfermedades infecciosas de las pezuñas se pueden tratar a nivel local y/o sistémico, teniendo en cuenta el uso responsable de antibióticos y el pronóstico de cada caso. Después del tratamiento local de la pezuña, se debería colocar un vendaje durante un par de días para mantener la pata del animal a salvo y protegida.
Cuando la vaca está en el potro de arreglo de cascos, se recomienda el arreglo preventivo de los otros miembros para asegurarse de que no hay lesiones ocultas o emergentes en las otras patas. Independientemente de la causa, los animales con cojeras deben ser separados del rebaño y se les debe proporcionar una cama cómoda. La cojera puede ser controlada mediante el arreglo regular de los cascos, asegurando unas medidas de bioseguridad adecuadas (enfermedades infecciosas), una ración equilibrada y proporcionando un confort adecuado a las vacas (suficiente espacio de estabulación, suelo y cama adecuados).